domingo, 11 de diciembre de 2016

Divagaciones decembrinas

Resultado de imagen de diciembre 2016



Disfrutando de este mes de diciembre, el último mes del año, de este año de 2016, me dispongo a publicar este artículo precaviéndome por si los futuros días me son adversos y no me dan tregua, siquiera unas horas, para publicar en este mi blog. Hoy, domingo, estoy en traje como bien corresponde al día en que vivo. Quiero decir que estoy vestido con pijama, bata y zapatillas. No creo que haya que objetar nada a esto. Como aducía una amiga mía, estoy en mi casa y me da la gana. Pues, eso. Tal cual. 
Los meses precedentes han sido trepidantes. No he tenido respiro. Puedo afirmar que han sido positivos. Siempre con alguna tarea que realizar. Siempre con mi mente ocupada en algo. Siempre con algo nuevo que aprender. Ignoro lo que es el aburrimiento. Eso no va conmigo. Mi mente bulle constantemente. Lo prefiero así. Mejor bregar con algo que me congratula que convivir con la inactividad. También disfruto de ayudas que coadyuvan para que mantenga mis fuerzas. Por ejemplo, practico yoga. Una sesión de yoga aminora los problemas que puedan surgirme. No solo esto. También necesito conocer gente, hacer nuevas amistades. Eso sí, huyo de las personas tóxicas en cuanto las detecto. Digamos que pongo tierra de por medio. Es mi vida y yo dispongo de ella al igual que los demás disponen de la suya.
Aparte de todo esto, tengo una mujer que no me la merezco. Fiel compañera, fiel amiga, fiel confidente, con la que recorro este camino apasionante e incógnito que es la vida.
En fin, fiel lector, fiel lectora, gracias, muchas gracias por haber llegado hasta aquí. Espero hallar un hueco en próximos días para reencontrarme con vosotros de nuevo.



miércoles, 7 de septiembre de 2016

De las relaciones humanas y de amistad




La relación con otras personas es uno de los pilares de nuestra vida. Diariamente interactuamos con personas de todo tipo; amigos, conocidos, familiares... Cada uno nos aporta algo. Sea ésto para bien o no. Las personas que se van añadiendo a nuestro círculo social no son siempre escogidas por nosotros. También el destino juega una baza muy importante en ello. Sales a la calle te encuentras con un desconocido -o una desconocida- y sin saber cómo, comienza una conversación que nos lleva a incluir a dicho ser, primero como conocido y según vaya transcurriendo el tiempo tal vez lo aceptemos como amigo. Nunca se sabe. Esto es muy personal, ya digo. La intersubjetividad es consustancial al ser humano. Nadie puede vivir aislado. Únicamente se es autosuficiente cuando las condiciones físicas -geográficas- nos obligan a ello.
Hoy día, además, contamos con tales formas de comunicación como no había pensado la humanidad en toda su historia. Podemos estar en el norte y comunicarnos en tiempo real con alguien que esté en nuestras antípodas. Y no solo con una persona sino con varias a la vez. Son nuevas formas de comunicación, pero comunicación al fin y al cabo. Quien más, quien menos, tiene un móvil, un teléfono inteligente para ser más precisos con el que está en contacto con el resto del mundo. Ambas relaciones, la personal y la cibernética tienen que estar en armonía para evitar desajustes no deseados. Por ejemplo que nos hagamos esclavos ante un artefacto ciertamente fabuloso.
Yo intento dosificarme. Un tiempo para el cara a cara (o el tú a tú), otro tiempo para sumergirme en las nuevas tecnologías y, por fin, un tiempo para mí solo, bien mediante la meditación, bien mediante la reflexión. 
Como estamos a comienzos de septiembre, con un calor sofocante, no quiero abusar de vuestra paciencia. Si he logrado que me leáis, objetivo conseguido. Si por el contrario no me habéis encontrado, os espero para otra ocasión.

viernes, 19 de agosto de 2016

Escritos de una tarde de agosto

No quería dejar pasar la ocasión de escribir un artículo en este mes de agosto. Además llevo mucho tiempo sin publicar en este blog, lo reconozco. Hoy tengo tiempo y ganas. Algo que a veces es harto difícil de compaginar. Pero -¡ea!- aquí estoy, dispuesto a ello.
He de manifestar que el tiempo se ha aliado conmigo en esta ocasión. Después de unos días tórridos, hoy, sin embargo, hace fresco. Lo cual he agradecido encarecidamente. Tal vez sea, precisamente, el cambio de presión lo que me ha empujado a ponerme ante el teclado y escribir. De lecturas, por otra parte, voy sobrado. No hay día en que no lea al menos un periódico y también echar mano a un libro, con mi inseparable diccionario, claro está. Todo ello en formato papel. Ésto lo sabéis bien los que me leéis habitualmente. También escribo, mas esto lo dejo para mí. Escritos que quedan guardados por si alguna vez me decido a publicarlos.
Aparte de este blog tengo otro par de ellos más circulando por el ciberespacio. Me leen en más de treinta países (puedo demostrarlo por si hay algún incrédulo). 
Me lo tomo con calma. Y también con mucho orgullo y con responsabilidad. Tengo que confesar que escribo para mí. Para nadie más. Y, si además me siguen y me leen, miel sobre hojuelas.
Hoy 19 de agosto, ya va declinando el mes pero aún quedan unos deliciosos días del mismo para solazarse con ellos.
Por la ventana me llegan las risas y gritos de los críos que juguetean por las calles. No saben estas criaturas la alegría que nos supone a los que tenemos una cierta edad. Ver solamente jubilados no llena a uno en esta vida. Necesitamos la alegría vitalista de nuestros niños.
Y no he hablado hoy nada de política. Necesito desintoxicarme un poco para lo que nos espera. Tampoco, por otra parte, he mencionado nada de los Juegos Olímpicos de Río. Seguramente a la hora de la cena veré en la tele noticias de ambas cosas.
Y voy recogiendo los bártulos. Si habéis estado ociosos y me habéis leído hasta el final, os lo agradezco enormemente. 



jueves, 5 de mayo de 2016

Soy hispanoescribiente




Viendo los magros acontecimientos realizados por parte de nuestras autoridades en el IV Centenario de la muerte de Miguel de Cervantes, quiero reivindicar desde este espacio la defensa del español (o del castellano, si así lo preferís) como vehículo de expresión y comunicación entre varios cientos de millones de personas que usamos esta lengua para comunicarnos. 
No hace falta confesarlo, salta a la vista, que disfruto escribiendo en español. Imagino que como le sucederá a quienes escriben y se han criado entre otras hablas, en otros idiomas. Además para aprender a hablar o escribir en otros idiomas, lo imprescindible es conocer primero el tuyo. Lo demás vendrá dado por añadidura.
Soy lector impenitente. Juzgad vosotros mismos, amables seguidores, cómo me expreso. Un texto escrito es una carta de presentación. En él se demuestra la cultura, el conocimiento, la imaginación, la perspicacia del que escribe. También hay que saber perdonar los pequeños errores que podamos cometer nosotros mismos como bien aconseja Álex Grijelmo.
Además de todo lo dicho, poseemos una Academia Española de la Lengua que vigila el exorbitante número de acepciones que se utilizan en nuestro idioma. Contando, cómo no, con el resto de las Academias (ASALE) que con su unión enriquecen aún más, si cabe, nuestro acervo cultural. 
Para escribir, para leer, o para pensar utilizo todos los días, y digo bien, todos los días del año, mi inseparable DRAE. Cuento además con la inestimable ayuda de la Fundéu que me saca de dudas o de tinieblas lingüísticas que no pueda localizar en otro lugar.
En fin, queridos lectores y lectoras, recojo los trastos y me lanzo a seguir leyendo al inimitable Juanjo Millás, al que tantos ratos de excelente lectura debo.

miércoles, 2 de marzo de 2016

De médicos





La semana pasada tuve que hacer una visita al médico porque me encontraba fatal. Catarroso, griposo, o algo parecido. El caso es que me preparé a tal efecto. Llegué a la hora estipulada. Pero como muy bien sabéis, seguro que lo sabéis, los médicos siempre te hacen esperar un poco dado que cada paciente es un mundo. Hay pacientes que con cinco minutos de revisión tienen de sobra y otros a los que hay que mirar con lupa, ya que sus síntomas son más sospechosos. Tengo que decir que no suelo acudir mucho a las consultas sanitarias. Únicamente cuando me encuentro mal, mal. Conozco a personas que, por el contrario, a la mínima señal de molestia o de malestar en seguida recurren al médico más próximo. Y como este mundo de batas y fonendos no me es desconocido, también tengo que añadir que lo que peor llevan los médicos son las famosas "guardias". Eso de que te toque una noche, por poner un ejemplo, estar a la espera de que alguien te llame porque repentinamente se encuentra mal, suele ser algo penoso. Pero igual que digo en ésta, lo digo de cualquier profesión. Estar, por lo general, toda la noche en vela te corta el día, te cambia los horarios, te  modifica el sueño. Estoy hablando de los que trabajan de día y de cuando en cuando les toca hacerlo por la noche. Otra cosa es el que tiene un trabajo nocturno, ya más habituado a estos horarios.
Y recuperado ya de mis dolencias, retomo mi vida activa con más energía. Ya sabemos que la salud cuando se deteriora, aunque sea ligeramente, es un engorro. Algo fastidioso. Eso de guardar cama me molesta. Prefiero la actividad.
En fin, queridos lectores, que os deseo salud para todos. Así sea.

martes, 23 de febrero de 2016

Por una enseñanza pública



La enseñanza, y por extensión la educación, en nuestro país ha estado controlada ferreamente por el clero. El clero católico lógicamente. Desde que el dictador Franco puso la educación de los estudiantes en manos de los frailes, éstos lo tomaron como si de su cortijo se tratase. Llegó la "democracia" y creíamos que la enseñanza pasaría a ser eminentemente pública y que la enseñanza privada, la del clero, fuera para el que la quisiera. Y para los que quisieran o pudieran pagarla. Sin embargo, ¿qué ocurrió?, que los sucesivos gobernantes continuaron aportando millones y millones, entonces de pesetas y ahora de euros, a la enseñanza privada en detrimento de la pública. No solo se les entregaba dinero sino también terrenos, edificios, locales. Vamos, que iban de sobra servidos. Ni con gobiernos de la derecha, ni con gobiernos de la izquierda, éstos fueron los que más dinero apoquinaban a las arcas eclesiales, con ninguno, decía, se paró la sangría de fondos públicos a los bolsillos privados. El grupo más beneficiado, secta sería mejor denominarla, fue, es, el Opus Dei. Hábiles, donde los haya, en colocar a sus acólitos en los puestos o en las proximidades del poder han conseguido forrarse literalmente durante decenas y decenas de años. Uno de los casos más indignantes fue el del que fuera ministro de Educación del PP, Wert. Este sujeto, después de concederle a la Iglesia católica y más exactamente a los opudeístas, todo lo que se podía concederles y más, mucho más, llegando incluso a imponer las materias de estudio válidas y no válidas, según fuera su antojo, este tal Wert ahora vive en un retiro dorado donde no sabemos muy bien a qué se dedica. Pero vivir, vive como un rajá. Que me quiten lo "bailao", se dirá a sí mismo.
Para que este saqueo constante de las arcas del Estado a las entidades privadas se detenga en seco, alcemos las voces para clamar, en este caso, por una enseñanza pública y de calidad.
Entre todos, si nos ponemos a ello, lo conseguiremos. 


domingo, 14 de febrero de 2016

De bares


Los bares son esos sitios a los que solemos asistir a menudo. Cada uno tiene sus preferencias. Hay para todos los gustos. Los hay que no hay dios que se entere de lo que se habla debido al alto volumen de la música. Otros en los que predomina la intimidad. Yo, personalmente, prefiero los que tengan un ambiente agradable. Que la decoración y los clientes me agraden. Además que el camarero me conozca y sepa mis gustos. Ya digo que esto depende de las tendencias de cada uno. Aparte de la buena conversación me decanto por los que tengan la prensa del día. Eso es muy importante. Y ya, de paso, que haya cobertura para el móvil. Aquí, mientras esto escribo, no puedo dejar de esbozar una sonrisa de complicidad con los que están leyendo este artículo. Seguro que asienten afirmativamente.
Por lo general hay, según mi experiencia, dos tipos de bares. A los que se asiste por la mañana y a los que se asiste por la noche. Esto es importante porque seguro que la clientela es diferente según la hora. Luego está el bar que está al lado o cerca de tu casa. Estos suelen ser de los que uno puede visitarlos en cualquier hora del día.
En fin, que todos tenemos nuestras vivencias, y según éstas, escogemos dónde queremos ir. Y aquí paz y después gloria.



viernes, 12 de febrero de 2016

Viernes lluvioso



Hoy viernes ha llovido. Y además hemos tenido que aguantar el frío y el viento. Por eso lo mejor es refugiarse en casa, en la de uno o la de algún amigo o amiga. Sí, es cierto, hay ciertas cosas que no queda más remedio que hacerlas. Alguna compra, algún encargo, salir al obligado paseo. Ya sabéis a lo que me refiero.
Tengo que confesar que me siento con mucha fuerza. Tanto física como mental. Por lo cual, en ese aspecto, no tengo queja.
Además tengo unos compañeros y unas compañeras que me apoyan, que me valoran y que confían en mí. En eso sí que he tenido suerte, mucha suerte. Están en los cuatro costados del país pero me hacen llegar su ánimo, su complicidad y su inestimable solidaridad. No todos pueden decir lo mismo. Hago balance de quién merece la pena y quién no. Y como por sus hechos los conoceréis tienen todo mi apoyo y estima. Si necesitan algo saben dónde encontrarme.
Y en estas reflexiones voy pasando el tiempo. Tiempo bien aprovechado, todo hay que decirlo. Sigo con una media de un post al día. Generalmente dos, ya que escribo también en otro blog que tengo. Pero me anima la vida el escribir. Es decir, miel sobre hojuelas.
Y mañana, sábado. ¿Será tan fructífero como lo ha sido este viernes?
Veremos.

jueves, 11 de febrero de 2016

Saboreando la vida




A estas horas de la noche hago memoria de cómo me ha ido el día. No ha estado mal, creo que nada mal. Claro que es una sensación subjetiva. Depende de lo que cada uno entienda lo que es pasarlo bien o mal. Pero yo me entiendo. He vivido, he sentido que la vida y yo hemos ido de la mano. Por lo tanto no han sido unas horas perdidas, un día perdido. Al contrario, estoy satisfecho conmigo mismo. Es más, estoy en paz conmigo mismo.
¿Se le puede pedir más a la vida? Yo diría que no. Rotundamente no.
Lo que sí que he aprehendido es que el estado de felicidad no dura siempre. Mañana, ¿qué me deparará el día? A todo esto, mañana es viernes. Y creo sinceramente que los días malos si son viernes, son menos malos. Eso lo tengo comprobado.
Además hoy me he llegado hasta la biblioteca pública donde resido ahora. Atendido por una joven y atenta bibliotecaria.
He paseado saludando a las personas que conozco. Y también a algunas a las que no conozco. Siempre tengo a alguien con quien hablar o intercambiar unas palabras, por lo general amables.
El sueño, a estas horas comienza a rondarme. Todavía permaneceré unas horas de vigilia. Tengo que rematar este magnífico día. Que no me lo amargue nadie a última hora. Que con estas cosas nunca se sabe.
En fin, queridos lectores y lectoras, aquí os dejo este escrito para que paséis un rato agradable. Esa era, al menos, mi intención.

miércoles, 10 de febrero de 2016

Titiriteros, libertad de expresión



Hoy miércoles, tras cinco días de permanecer en prisión, por fin han salido en libertad los dos titiriteros acusados de enaltecimiento del terrorismo. Ya sabemos que a las "buenas gentes" de la derechona todo lo que sea popular lo desprecian. Como si lo aborrecieran. Que de hecho lo aborrecen.
Al  ayuntamiento de Madrid, presidido por Manuela Carmena, le pareció bien animar a los ciudadanos de la villa con un acto lúdico. Pero hete aquí que la caverna mediática que está esperando que pase el menor de los casos para denigrar rápidamente al consistorio de Carmena. 
Ese engendro que es la pepera Esperanza Aguirre, no pierde ocasión para tirarse a la yugular de Manuela, a la que acusa de lo que sea, con tal de tener algo de notoriedad en los medios.
Pero los personajillos del Partido Popular tienen que tirar de lo que les da votos. Y como con ETA tienen una mina para atemorizar al país, el PP ha visto en esta función, han visto, digo, el cielo abierto. Hay que decirle a este hatajo de gobernantes que padecemos, que nosotros no tenemos miedo a ETA. Que les tenemos miedo a ellos. Los mismos que nos han recortado nuestras tan ansiadas libertades.
Y vuelvo con los titiriteros. Su situación ha sido comentada en la prensa internacional. Como se puede comprobar el cachondeo por lo que sucede en España es unánime.
Y el zote de ministro del Interior que tenemos, dando saltos de alegría por habernos defendido, él, del mal. Fernández Díaz es un conocido meapilas que otorga medallas a toda virgen que encuentra.
Habría que recordarle al tal Fernández Díaz, el homenaje que se le hizo a la División Azul con cargo al erario público. Pero, claro, eso no es apología del fascismo y del nazismo.
Esto es Españistán.

martes, 9 de febrero de 2016

Los cenizos




Tengo por costumbre huir de las personas que me dan "malas vibraciones", las que me eliminan mi energía positiva, las que me hacen sentir mal cuando he acabado de escucharlas. A estas personas yo las llamo los cenizos.
Agradezco que cuando hablo con alguien, ese alguien me sonría, sea abierta, no me dé "la paliza". El cenizo es persistente, quiere que pienses como piensa él. Aunque él mismo sea un zote. Por eso huyo de ellos, los evito, intento escurrirme. Pero ahí están dándote la paliza. No viendo más allá de sus narices.
Tengo un amigo, cenizo, cenizo de verdad, de los que lo llevan en su ADN, que me tiene frito con sus comentarios por whatsapp. Y los días que lo veo en persona son las peores horas del día, con mucho. El cenizo habla y habla. No escucha lo que tú le dices, o más bien, tratas de decirle. Siempre tiene la razón. Y si no se la das, ya está armada. Entonces te mirará con malos ojos. Incluso te incluirá en su lista negra.
Con un poco de suerte me libraré de tan nefasto personaje. He podido comprobar que no soy yo solo el que le huye. Varios amigos y amigas me han confirmado que sienten lo mismo que yo.
Y como alguien tenía que decirlo, aquí lo dejo escrito. A ver si se da por aludido. Como último recurso también puedo bloquearlo en el whatsapp. Que no es mala idea.
Y mañana será otro día, queridos lectores y lectoras.

lunes, 8 de febrero de 2016

Pasando la noche

Después de haber cenado suelo ver un rato la tele. Suele ser la única hora que me fijo en dicho aparato. A no ser que emitan una película o un acto interesante. Soy más de leer y escribir. La televisión podría ser un medio formidable de inculcación de cultura, de hacernos pensar a través de la emisión de programas educativos. Sin embargo la realidad es muy diferente. Lo que prima en la mayoría de las cadenas televisivas es lo frívolo, lo chabacano, lo vulgar. Y estas cadenas se matan entre ellas por intentar programar la mayor televisión basura.
Cierto es que hay todavía televisiones que evitan estos programas que denigran el intelecto de los que se topen con ellos.
Recuerdo con nostalgia, en el siglo pasado, programas como "Cosmos" de Carl Sagan. Los de Félix Rodríguez de la Fuente, o también las series británicas, de las que me viene a la mente "Yo Claudio" del autor Robert Graves.
Pero ya que estamos recordando, bueno sería trasladar a nuestro tiempo ideas que nos hicieran retomar programas que a la vez que nos distrajeran nos hicieran pensar y adquirir mayores índices de cultura. Y, aunque difícil, ir terminando con programas hechos para tarados mentales. Televidentes a los que no les gusten pensar, sino que piensen por ellos.
Lector, lectora, si este post ha sido de tu agrado, vendría bien que dejaras tu opinión.
Y continúo escribiendo un artículo diario. Y con fruición. Con enorme fruición.

domingo, 7 de febrero de 2016

Prensa en fin de semana





La prensa escrita que nos llega los fines de semana, suele ser mucho más abundante en contenidos que el resto de los días. No sólo el periódico en sí mismo, sino que le añaden suplementos. Cosa que, por otra parte, es de agradecer. Sábados y domingos, como digo, aumentan el volumen de los periódicos. Ignoro si es para que nos quedemos más tiempo en casa leyendo. O, por el contrario, que como estamos más tiempo en casa también leemos más. Sea como fuere, benditas sean las informaciones, opiniones, esbozos, que nos llegan en formato papel. Siempre en papel, por favor.
Total, que entre el tiempo dedicado a la lectura de periódicos, más el añadido de escribir sobre lo que has leído se pasa el fin de semana en un tris. Pero terminas la semana con el orgullo de haber dedicado tu tiempo a algo enormemente positivo. Son los mejores ratos, sin duda alguna.
Sales de casa lo justo. Un breve paseo para volver a leer lo que habías dejado pendiente. Y también incluyo la tan siempre sana costumbre de acompañarme de mi querido diccionario de la RAE, por si surge algún vocablo que desconozco.
Si los ciudadanos comprendieran que deben estar informados, y que su opinión, la opinión de todos, cuenta, correrían a comprar periódicos a todo pasto. Yo en este caso no tengo problema. Estoy suscrito y me lo traen a mi domicilio. 
Y finalizo este post dando las gracias a la prensa escrita por seguir estando ahí, a pesar de los pesares.

sábado, 6 de febrero de 2016

Vagabundear





A pesar de los viajes que he realizado en toda mi vida, siempre volvía a casa, a mi morada. Estas travesías me servían para conocer nuevos parajes, nuevas gentes, otras costumbres, otros hábitos. Y precisamente por eso aprendí dónde quiero estar. Dónde me gusta residir. Sin abandonar mi natural curiosidad de viajero, creo que llega una edad, un tiempo, en el que debo y quiero echar raíces. Tener un lugar, un espacio del que poder decir: "esta es mi tierra". O, añadir también después de un largo viaje. "por fin regreso a mi casa".
Ahora estoy a gusto donde resido. Tengo las necesidades básicas cubiertas. Eso sí, sin lujos ni riquezas. Ni las quiero, ni las necesito. Es más, diría que no me hacen falta. Lo que realmente me hace falta es mi mujer, mis amigos y amigas. Poder ver anochecer y amanecer cada día. Leer y escribir siempre que quiera. Evitar las preocupaciones. Evitar los cenizos. Éstos, lo tengo comprobado, te quedan sin energía, sin la energía positiva que llevo siempre conmigo.
Ahora llega hasta mi búnker el olor a comida. Es la hora de la cena, y además estoy hambriento. Por lo que voy dejando este post.
Como habréis comprobado os dejo un vídeo de Serrat. Sé que a los que lo conocéis os encantará. A los que no, disfrutad de sus canciones. Merecen la pena.

viernes, 5 de febrero de 2016

Queremos pensar por nosotros mismos




La progresiva desaparición de las humanidades de los planes de estudios educativos en nuestro país es alarmante. Los gobernantes que estamos sufriendo y padeciendo atacan de lleno a nuestros jóvenes alumnos. Pero a ellos, los gobernantes, les da lo mismo que lo mismo les da. Si ya de por sí los planes educativos iban de mal en peor, ministros como el infame Wert acabaron por darle la puntilla. Wert, después de aniquilar la educación y la cultura, vive ahora en un retiro dorado a cargo de los contribuyentes. Eso sí, entregó al clero beneficios millonarios en forma de terrenos, aportaciones dinerarias, y en toda forma posible de trapicheo. La cultura y la educación le importaba bien poco, nada, el caso era medrar desde su puesto de ministro. Como esta gentuza de la derecha solo les importa su cartera, sus millones en paraísos fiscales, lo que le pase al país se la trae al pairo. Y así nos va como nos va.
Leo estos últimos días, con rabia contenida, cómo a los escritores que sigan cobrando derechos de autor se les suprimirán sus pensiones. Los golpes, los zarpazos, que el gobierno del PP, de su presidente Mariano Rajoy, al mundo de la cultura, del conocimiento, de la ciencia, pasarán a los anales de la política de este país.
Sin embargo, el establishment estará orgulloso de dirigentes como los que sufrimos. Eso de que la ciudadanía piense, de que se les enseñe a pensar a nuestros alumnos por sí solos es peligroso, muy peligroso. No hay problema. Gobernantes como estos franquistas que están en el poder, harán lo indecible para que aquí no se mueva ni Dios.

jueves, 4 de febrero de 2016

La banca siempre gana



Escribía Aristóteles en su obra "La Política" que "el dinero ganado con el dinero es la usura". Entendida la usura como el interés excesivo que un individuo devenga de otro u otros. Esta práctica, común en casi todos los bancos hoy en día, es la que nos ha llevado y nos sigue llevando a la situación tan lamentable de la economía mundial. Los seguidores del economista Milton Friedman, harían que el llamado libre comercio se armara contra cualquier postura contraria a sus intereses. Friedman hacía una relación entre inflación y salarios. Aducía que al aumentar la inflación, los trabajadores exigirían un aumento de salarios. Hecho éste lógico por otra parte. Pero viene esto a colación de por donde van los tiros. En estos asuntos, yo me decanto más por las ideas de Paul Krugman, fuerte crítico del liberalismo y más acorde con las ideas progresistas de una economía moderna.
Prosigamos con nuestro razonamiento. La banca inventó las más inverosímiles inversiones para continuar obteniendo beneficios. Fondos tóxicos, Preferentes... Y todo trato que les confiriera enormes ganancias en las que en caso de fracaso el que saldría más perjudicado, como siempre, sería el ciudadano.
Luego vino lo que vino. Los bancos, mal dirigidos y peor gestionados, comprendieron, al fin, que tenían más "humo" que fondos. Y se temía por el derrumbe inevitable de estos. ¿Cuál fue la reacción de los gobiernos? Comenzar a inyectar como fuera, fondos para rescatarlos. Los gobiernos nos endeudaron hasta límites insospechados con tal de poner a los bancos a flote. Y, más aún, advirtiéndonos que no sería un gravamen para los ciudadanos. Que nos engañaron como a chinos, vamos... Solo hubo un país que, ante esta situación, encarceló a políticos y banqueros. Ese país fue Islandia. Entendió claramente que había que rescatar a las personas, no a los bancos.
Pero lo funesto para nosotros es que aquí manda la Merkel y la troika. Esa es la diferencia. 

miércoles, 3 de febrero de 2016

Nuestros pueblos desaparecen





La mayoría de los pueblos de nuestro país están condenados a desaparecer. La escasa población que aún habita en ellos va envejeciendo inexorablemente. Y a esto hay que añadir que la natalidad es muy baja, por no decir inexistente. Se buscan fórmulas eficientes para fijar población, empero los jóvenes, los escasos jóvenes que todavía siguen viviendo en sus pueblos, tarde o temprano marcharán a la ciudad como ya lo hicieran sus hermanos o familiares anteriormente.
Bien es cierto que hay alcaldes que han conseguido, no sólo evitar que la población de sus ayuntamientos descienda, sino que aumente. Pero son los menos. Es difícil, muy difícil, animar a la juventud a que no abandone sus localidades, mas ante la situación poco halagüeña que se les presenta, quien más, quien menos va pensándose ya buscar un futuro mejor lejos de su pueblo.
Cuando se ve realmente el potencial que tienen estas localidades es en sus fiestas. Celebradas, generalmente, en los meses de verano. Entonces los que están lejos de sus tierras, retornan aunque solo sea por unos días, a sus lugares de origen. A vivir las fiestas. A reencontrarse con familiares y amigos. Son días en que los pueblos se vuelven a llenar de gente. Y arrastran con ellos a sus deudos. Esto es, sus esposos o esposas y a sus hijos, nacidos, seguramente en otras tierras, en otras ciudades.
Las políticas de los gobiernos tanto regionales como del gobierno central son escasas, por no decir inexistentes. No ven más allá de sus narices. ¿Qué más les da que un pueblo pida mejoras, de la naturaleza que éstas sean? ¿Nos darán más votos? Se preguntan nuestros sesudos políticos. Bien conocen ellos que no. Que diez votos no van a ninguna parte. Y comprobamos, claro está, que dejan las cosas como están. Que no interesa, que no les interesa, el destino que puedan sufrir nuestros añorados y queridos pueblos.
Esta es la triste realidad.

martes, 2 de febrero de 2016

Que viene Bernie





Bernie Sanders es un veterano político socialista que aspira a la presidencia de los Estados Unidos de América. Procede de las filas del Partido Demócrata. Y disputa a su contrincante Hillary Cinton la nominación de su partido a la presidencia. 
De momento, Sanders puede sentirse satisfecho de lo conseguido. En el caucus de Iowa, celebrado recientemente, los dos candidatos han obtenido un empate técnico. Pero para los que seguimos al avezado socialista norteamericano, estos resultados son un triunfo para él. Clinton creía que ganaría fácilmente en Iowa y se ha llevado el primer revés de la precampaña.
Hillary Clinton posee el apoyo económico de grandes fortunas. Todo lo contrario que Bernie Sanders, que ha apostado por un sistema de financiación más afín a sus ideas.
Es paradójico comprobar como una gran mayoría de jóvenes apoyan decididamente a Sanders. Su proyecto y su discurso han calado en ellos. Y es más, está consiguiendo la simpatía de todos los socialistas progresitas, sean de donde sean. Ha recibido la complicidad del dirigente laborista británico Jeremy Corbyn. Es decir, que Sanders tiene apoyos no sólo en su país, sino el reconocimiento de los socialistas internacionales.
Y esto no ha hecho más que empezar.

lunes, 1 de febrero de 2016

Regreso a los orígenes


Madrugada del lunes. No tengo sueño y me refugio en mi querido blog, al que acudo siempre que quiero tener compañía. 
Se puede decir que vuelvo a mis orígenes. Escribiente nocturno fue creado para la noche, para escribir de madrugada. Como lo hago ahora. No obstante, el tiempo hizo que ampliara mi horario, mi horizonte, y por ello no es de extrañar que escriba a cualquier hora del día. Pero esta noche me recreo. Juego con el tiempo. Al igual que me gusta jugar con las palabras. Las palabras, el léxico, el vocabulario, se aprende con el devenir del tiempo. Hacen falta muchas horas de lectura y acudir siempre, siempre, al diccionario. Y por supuesto tener buena memoria, excelente retentiva. Por eso los que escribimos siempre estamos aprendiendo. A pesar de dominar el lenguaje. Es precisamente esta confianza en el idioma la que nos hace, a veces, cometer algún que otro error. Pero el amable lector que sigue a quien escribe, sabrá muy bien interpretar esos pequeños e insignificantes errores como una anécdota sin importancia. Otra cosa es que quien escriba en cualquier medio sea un zote. Es, en este caso, cuando el escritor pierde toda credibilidad. Viene esto a colación porque cuando nos relacionamos con gente iletrada durante mucho tiempo, adquirimos, sin querer, los tics negativos de ellos, y caemos en el error de usarlos nosotros también. Pero contra estos vicios lingüísticos a los que me refiero está la virtud de leer. Y por supuesto utilizar el diccionario a todo pasto.
Pero volvamos a la noche. Se  suele decir, con toda razón, que el cuerpo humano tiene un reloj biológico. Esto es, que está programado para vivir de día y dormir por la noche. Pero porque transgredamos esta ley, de cuando en cuando, no se nos va a caer el cielo encima.
Van a ser las cinco de la madrugada. Buena hora, sí, señor. Y como lectura y escritura se complementan íntimamente, me apetece leer. Leer lo que han escrito otros. Así no se me entumecerá la mete. Mi mente, mi cerebro, siempre está joven, porque lo mantengo en activo.
Si te he hecho pasar un rato agradable, querido lector, querida lectora, esa era mi intención.
Muchas gracias por estar ahí.


sábado, 30 de enero de 2016

Viajando






He realizado muchos viajes a lo largo de mi vida. Viajes de todo tipo. Y me han dado la oportunidad de conocer nuevas gentes, nuevas costumbres y hábitos diversos. Siempre se aprende algo que añadir a nuestro bagaje cultural. Y guardar en mi videoteca mental lo que he vivido en dichos trayectos. Tengo que reconocer que también depende con quién hagas dicho viaje. Si vas acompañado de otras personas con las que te sientes a gusto, las experiencias serán más positivas. Por otro lado, si vas acompañado por personas con las cuales no empatizas muy bien, ya puedes visitar el sitio más hermoso de la tierra, que harán que te parezca que has ido a parar al paraje más horroroso. Esto que cuento nos pasa a casi todos. La compañía que escojamos es muy importante a la hora de decidirnos por un destino concreto.
Y también cuenta las gentes a las que visitas. Suele haber de todo, como en cualquier pueblo del mundo. Buenas gentes, y otras que son despreciables. Pero con estas nos toparemos vayamos donde vayamos. De ahí que haya escogido esta canción del enorme Serrat con letra de nuestro inmortal Antonio Machado. Que viene a reflejar, claramente, lo que estoy escribiendo.
Hoy seré breve. Tengo la agenda muy ocupada (como los altos directivos).
Hoy sábado me voy a dar un atracón de lectura. Saldré de paseo y daré un garbeo por Internet. Como veis, día variado.
Besos para ellas y abrazos para ellos.


viernes, 29 de enero de 2016

Los sin techo





Si hay algo que no llevo bien cuando paseo por una ciudad, la que sea, es ver a esas personas que por circunstancias de la vida viven en la calle. Es más, duermen en las calles. Personas que no tuvieron suerte en la vida o que ésta les jugó una mala pasada. Están acostumbradas a vivir solas. Deambulan de una parte a otra buscando abrigo, calor y la mayoría de las veces también alimento. La gente pasa a su lado sin prestarles la mayoría de las veces atención. Vagan sin rumbo fijo, tratando de pasar el día lo menos malo posible. Acarrean con lo poco que poseen. Como si llevaran con ellos un tesoro (que para ellos es un tesoro).
Las políticas sociales de un país deberían de tener un poco más de "corazón" y volcarse con ellos en todos los sentidos.
En nuestro país la entonces aspirante a la alcaldía de Madrid, Esperanza Aguirre, del PP cómo no, propuso expulsar a los indigentes del centro de Madrid. Ya que, según ella, espantaban al turismo. Cómo se nota que la señora marquesa consorte vive bien, demasiado bien. Los indigentes para ella son cosas, "bichos raros" que hay que esconder, limpiar de las calles para que no molesten. ¿Dónde vamos si los políticos, ciertos políticos, piensan así? Y para mayor desgracia los ciudadanos les votan. Cuando lo que había que hacer es inhabilitarlos para cualquier cargo público. Por inhumanos, desalmados y crueles.
Los sin techo suelen, la mayoría de las veces, padecer enfermedades. Enfermedades crónicas, generalmente. Alcoholismo, enfermedades mentales, desnutrición... 
Valga este artículo si con ello consigo despertar la conciencia social de los ciudadanos. Procurando conseguir un mundo mejor. Para todos.

jueves, 28 de enero de 2016

De las Redes Sociales





Hoy en día, ¿quién es la persona que no esté integrada en una Red Social? Prácticamente todo el que posea un ordenador, tablet o móvil, seguro, seguro que está registrado en una red. Ya se sabe aquello de, quien no está en Internet no existe. Y esto es realmente cierto. Cualquiera puede buscar a una persona determinada en un navegador, y si esa persona está en algún medio conocido de Internet, seguro que la encuentra.
Hay que reconocer que las RRSS son un vicio. Cuando entras en su mundo, cuando te registras en alguna de ellas ya estás enganchado. Sí, puedes aguantar algún tiempo sin acceder a ellas, pero tarde o temprano miras lo último que se ha publicado en ellas.
Los que actuamos casi diariamente en Internet tenemos un campo de visión más amplio. Conocemos las noticias muchas veces antes de que se publiquen en la prensa o en el resto de los medios. Por eso es tan importante Internet. Por eso los gobiernos quieren controlarlos. Saben que su fuerza es poderosa, muy poderosa. Que la información ya no solo la controlan ellos. Que las cosas han cambiado. Que nosotros somos, ahora, generadores de información también.
Y como dice el dicho, "eres dueño de lo que callas y esclavo de lo que dices". Viene esto a cuento porque los políticos miran lo que han escrito otros políticos. Lo escudriñan hasta el más mínimo detalle para echarles en cara a sus opositores lo que escribieron en dichas Redes. Y si el contenido no es muy correcto se lanzan a la yugular del oponente para denigrarlo y derrotarlo, si pueden, claro.
A pesar de todo ello, queridos lectores, ¿quién se resiste a no pertenecer a una Red Social hoy día? Poca, muy poca gente diría yo.
Y, acabando este post, me voy zumbando al Facebook para enterarme de las últimas y apasionantes noticias del día.

miércoles, 27 de enero de 2016

La ambición de Mariano Rajoy




De esta persona, que aquí veis, ya no se sabe qué pensar. El presidente en funciones de este país, Mariano Rajoy, continúa impertérrito en su deambular por pasillos y sedes, creyendo que aún puede volver a ser elegido presidente. Recordemos cómo reconoció en su día que no tenía apoyos suficientes para formar gobierno. Pues bien, donde dije digo, digo Diego, y reaccionó muy a su estilo. Añadiendo que no pensaba retirarse como futuro candidato, de nuevo, a la presidencia del país.
Rajoy, que es y sigue siendo, sospechoso por corrupción siempre ha evitado dar explicaciones donde debía. Es decir, dar explicaciones en el Parlamento y a los ciudadanos que somos los que le mantenemos. A él y a su recua de ministros. Seguimos sin saber si recibió sobres en negro. Todas las pruebas y evidencias le señalan con el dedo como presunto corrupto. Al igual que su partido, el PP. Por cierto acaba de conocerse otro caso, más, de corruptos en el Partido Popular, esta vez en Valencia. La operación podría ser aún, que ya es decir, más grave que el caso Gürtel. Es decir, corrupción generalizada a la que se le va dando largas para que los ciudadanos no pidamos explicaciones y nos olvidemos de ellas. Pues bien, después de todos estos desafueros, el impresentable Mariano dice no saber nada.
En el PP, antes AP, sus dirigentes sabían, conocían de sobra que la corrupción campaba por sus sedes y militantes. Pero estas cosas no podían salir a la luz. Un partido tan patriota, tan español, tan carpetovetónico, no podía admitir hechos de esta naturaleza. Es paradójico que con el transcurso del tiempo conociésemos que la gran mayoría de dirigentes del PP tenían, quien más, quien menos, cuentas bancarias en Suiza.
Y a pesar de todo esto, Rajoy continúa anhelando volver a ser elegido presidente de gobierno de España. Ahora sabemos todos por qué. ¿O no? 

lunes, 25 de enero de 2016

Escritos de una tarde de lunes

Debido a que mi malestar persiste, que no puedo comer alimentos sólidos porque después me pasan factura, y que únicamente puedo ingerir líquidos que es lo que no me hace daño, opto por ponerme a escribir. Como no flaqueo en esto de teclear, y puesto que me viene fenomenal para mi mente, pongo manos, mejor dicho pongo dedos a la obra, y a cubrir el expediente. Quién sabe, tal vez mañana no tenga tiempo para ponerme delante del ordenador. Y eso significa un post menos, un artículo menos. Y eso sí que no. Ahora que estoy en racha aprovecho el menor momento de energía y lo demás viene rodado.
Creo haberlo escrito aquí ya. Escribo sin red. Esto es, sin apuntes, sin chuleta, sin croquis. Todo es producto de mi caletre. Que por lo visto, y no es lo que diga, mejor dicho que lo escriba, yo. Juzgar por vosotros mismos queridos lectores si no me faltan recursos, incluso imaginación para distraeros con estas cosas que os cuento. A veces serias, otras más distendidas. Pero siempre, creo yo, interesantes. Al menos eso dice mi santa.
A todo esto, qué paz hay ahora en mi búnker. Mejor así. Prefiero estar concentrado en lo que hago. Aunque sea por puro esparcimiento. Y alabado esparcimiento.
Recibo una llamada por el móvil. Buenas noticias. El encargo que me hicieron parece ser que no ha estado mal del todo. Estoy contento conmigo mismo.
Las tripas me rugen de vacías que están. Sin embargo, no quiero, no debo comer. En seguida salta la alarma en mi cuerpo. Solo ingiero líquidos y yogures que me hacen más llevadera la tarde.
Y como, ahora sí, me siento débil, ceso aquí en mi actividad bloguera. Actividad que tanto júbilo me produce.
Feliz tarde.
Nos vemos.

En cama





Llevo unos días con problemas estomacales. No son dolorosos pero sí muy molestos. Hoy me decido y llamo a mi médica para informarme. Me contesta que ella está igual, que ha pasado una mala noche y que no ha acudido hoy al trabajo. Mal de muchos...(me he dicho para mí).
Me ha prescrito, mi médica, digo, líquidos y cama. Pero no puedo estar inactivo tanto tiempo, por lo que decido moverme entre la cama y el ordenador. Ojalá que así vaya espantando este virus.
Y enlazando con lo anterior, ahora me doy cuenta cómo deben sentirse los ordenadores con un virus en su sistema. ¿Les sucederá lo que a nosotros? ¿Necesitarán descanso? ¿Percibirán dolor o, al menos, molestias? Desgraciadamente todavía no sabemos si los ordenadores sienten o parecen. Cibernéticamente hablando, claro está. Esto hace que mire a mi ordenador con más cariño que antes. Nunca se ha quejado. O al menos nunca me he enterado.
Pero vuelvo a los humanos. Las afecciones menores que no son graves, empero te inutilizan para el trabajo, hay que tomarlas con paciencia. Virtud o defecto del que voy sobrado. Pero joden, claro que joden. Además me han hecho un encargo y tengo que cumplir. Por lo que tengo una infusión a mi lado a la que voy deglutiendo sorbo a sorbo. Y mi estómago no se cansa de recordarme que debo descansar o, si no, la convalecencia será más larga aún.
En fin, que escrito este post de un tirón, me largo a la cama, ya que mi cuerpo me lo agradecerá.
Esperaré la llegada de la tarde. Por si mejoro...

domingo, 24 de enero de 2016

Los amagos de Rajoy





Tengo que reconocer que el ínclito Mariano Rajoy es una verdadera bicoca para los que nos dedicamos a escribir sobre temas políticos. Bien sea desde un periódico, desde una revista, desde un blog, o desde cualquier otro medio por Internet.
Los amagos continuos a los que nos tiene acostumbrados no dejan nunca de sorprendernos. Este presunto corrupto, que sale en casi todos los papeles de dinero en negro de su partido el PP. Por cierto, el PP es el primer partido imputado en esta "democracia" española. Pero él, presidente del Gobierno y presidente del PP, no sabe nada. No se entera de nada. Tal vez (seguramente) la miríada de asesores, orientadores, consejeros, que están a su mando sean tan inútiles como él. Y así marcha el país como marcha. Por mucho que el tal Rajoy se empeñe en demostrarnos una y otra vez que vivimos en Jauja.
Ahora anda al juego del ratón y el gato (juego éste del que tanto sabe). Con motivo de la posible formación del gobierno, tras las últimas elecciones y después del recibimiento por parte de Felipe VI, Rajoy confesó que no tenía mayoría para llegar a un acuerdo con las demás fuerzas políticas para la formación de dicho gobierno. Pues bien, en una jugada de verdadero tahúr, horas después manifestaba que no renunciaba a ser candidato a la presidencia. Es decir, que le pasaba la patata caliente al otro candidato.
Y en estas estamos. Tal vez, algún día, veamos a la cúpula del PP sentados ante el banquillo de acusados y juzgados como se merecen por tanta irregularidad en su gestión. Todos ellos con Mariano Rajoy a la cabeza. Por el bien de los ciudadanos que no nos merecemos de ninguna manera a semejantes gobernantes.

sábado, 23 de enero de 2016

Protagonista, la radio




Haciendo un breve balance observo que en mi blog escribo a menudo sobre lecturas y escritos. Sin embargo caigo en la cuenta que casi nunca he hablado, o lo he hecho en pocas ocasiones, de la radio. Este magnífico artefacto que tanta compañía nos hace, y que tanta información nos proporciona, era el rey de la casa antes de la invención de la televisión. En todas, en casi todas, las casas era el centro de atención. Un medio de comunicación ágil y rápido. Lo que se decía por medio de las ondas hercianas era escuchado con gran atención por sus oyentes. Su seguimiento era mayoritario. Podemos decir que no tenía rival. Pero un día comenzaron a llegar a nuestros hogares aquel aparato al que llamaban la televisión. ¡Qué expectación, qué emoción! ¿Qué sería aquello que tanto revuelo había causado? ¿Sería, acaso, el fin de la radio? Pues no. La radio seguía teniendo sus millones de seguidores. Más aún que la propia televisión. Con el transcurso del tiempo los aparatos de radio se fueron haciendo más pequeños, mientras que las pantallas de televisión se fueron transformando en gigantescos artilugios. Por lo tanto no había color. Entre llevarse un transistor de un lado para otro y el cargar con un televisor de numerosas pulgadas, sabemos siempre quién ganaba.
Anoto aquí también que la televisión tiene su propio mote, "la caja tonta". No obstante, no he escuchado nada igual sobre la radio.
En fin, amigos y amigas, solo quería tributar un pequeño homenaje a este medio de información que tan buenos recuerdos nos trae (y nos seguirá aportando).

viernes, 22 de enero de 2016

El tiempo no se detiene





Comenzando a vivir un nuevo viernes. Otra semana que se va terminando. Que no se nos escape sin haber hecho algo positivo. Es decir, que no pase en blanco. De momento ya he cumplido con mi ritual, leer la prensa. Digital y en formato papel. Bien sabéis que siento mayor atracción por el papel que por el ordenador o el móvil. Si algún día, espero que muy lejano, me da por leer libros en ebook lo aceptaré. Pero mientras ese día llegue seré fiel al papel.
Todavía es temprano. Tengo todo un día por delante. Ya estoy con ganas de salir a la calle para respirar el aire de la mañana y que el cuerpo se ponga a tono. Hablar con los amigos, con las amigas. O bien, simplemente, con gente conocida. El caso es sentir la actividad del aquí y el ahora.
Mientras escribo estos acápites mi gata no deja de pasearse a mi alrededor. Sabe bien lo que estoy haciendo. Me ha visto, porque hay días que no se despega de mí, muchas horas, días, semanas, años, me ve, decía, delante del ordenador y sabe lo que estoy haciendo. Lo sabe de sobra. A lo mejor, sin que yo lo sepa, ha aprendido a teclear a base de verme a mí hacerlo.
El tiempo pasa rápidamente. A velocidad de vértigo. Pero siento con fruición lo que estoy haciendo. Me agrada, me relaja y me hace feliz. Creo que no puedo pedir más en instantes como este.
Ya he cumplido con lo que tenía que hacer. Estoy satisfecho. Un post más. Un artículo más. Y con ganas, con muchas ganas de volver a teclear. A escribir lo que vivo y lo que me queda por vivir.
Lectores y lectoras, os espero otro día. Mañana, o pasado mañana. ¿Quién sabe? Yo intentaré, y lo conseguiré, estar al pie del cañón.
Amén.

jueves, 21 de enero de 2016

En obras





Queridos lectores y lectoras, como veréis estoy haciendo algunos cambios en mi blog. Cambios para mejorarlo y modernizarlo.
Introducciones que he considerado convenientes. Ahora podréis visualizar mejor las estadísticas. Éstas comenzarán de cero y se irán añadiendo al contador de países con el paso del tiempo y la visitas de lectores y lectoras.
Estoy, como se suele decir, en obras. Por lo cual espero sepáis disculpar las modificaciones que estoy efectuando. Me lo estoy currando yo solito a base de bien. Mirando vídeos, consultando revistas especializadas y todo lo que conllevan consigo estas mejoras.
Muchas gracias queridos amigos y queridas amigas. Será un placer seguir contando con vuestras visitas. 
Nos vemos.

miércoles, 20 de enero de 2016

Yo estudio en la UNED





Esta es la universidad donde yo estudio. La UNED fue fundada en el año 1972. Por lo que ya tiene unos cuantos años de rodaje. Es básicamente una universidad, como su propio nombre indica, a distancia. Por lo cual, aunque en parte la enseñanza es presencial, lo que prima es la enseñanza telemática. El uso del ordenador es básico. Esto es, para cualquier estudiante que esté en ella matriculado. Además de los estudios oficiales, la UNED ofrece cursos de las más variadas disciplinas. Sus posibilidades son inmensas. Puedes ponerte en contacto con cualquier profesor o tutor desde diversos medios. Yo prefiero el correo electrónico. Es rápido y seguro, además de poder exponer tus dudas de la forma más eficaz. 
Es obvio decir que hay clases desde diversas sedes de la UNED que pueden seguirse a la carta. Cuando tú mismo decidas. El streaming es una tecnología fundamental para que prácticamente no perdamos ripio en nuestros estudios.
Los alumnos de la UNED salen muy preparados. Tenemos que tener en cuenta que echamos muchas horas, dentro de las que nos permite el día, por supuesto, muchas horas, decía, de estudio.
En cuanto a las edades se podrá encontrar a estudiantes de diversas generaciones. Coincidimos alumnos jóvenes con otros de edades más provectas (entre los que me incluyo).
Otro día contaré anécdotas vividas en mi experiencia con mi querida universidad.
Nos vemos.

lunes, 18 de enero de 2016

Pemán, fascista. Sí, fascista




El hecho mismo de ser escritor conlleva que el público que te lee o que te sigue, está más de acuerdo que en desacuerdo contigo. Por lo general, el lector busca aquello que se asocie con su forma de pensar. Llevar bien una relación escritor/lector es un acto fruitivo para ambos. Bien es verdad que el escritor no sabrá el nombre, ni el sexo o la edad de los que le leen. Por el contrario, el lector conocerá sobradamente al autor al que lee, y muchas veces venera.
Viene esto a colación sobre las declaraciones que realizó la concejal de Jerez, Ana Fernández, contra el escritor fascista José María Pemán. La concejala llamó al escritor misógino y asesino. Por eso, lo que no entiendo es por qué un personaje, fallecido hace muchos años y que la mayoría de los españolitos no han oído hablar de él, vuelva a "renacer" con las declaraciones de Ana Fernández.
¿Qué podemos deducir de todo esto? Que el fascismo, el franquismo en su estado más puro sigue cohabitando con nosotros. Es más, nos impele a actuar como si Franco siguiera vivo. Cosa que ya dudo porque visto que, después de más de cuarenta años de su muerte, sigue teniendo poder. Pero poder en todos los niveles.
Cómo será la cosa, que existe una Fundación Francisco Franco, que pagamos con nuestros impuestos y que tiene la desfachatez de incoar actuaciones judiciales contra aquellos que difamen a su venerado y sagrado Franco.
Pues bien, Franco fue un genocida. Y Pemán, muñidor en cierta manera, del golpe de Estado contra la II República, también es digno de que pase a la historia con este calificativo. 
En la fotografía que cuelgo, puede contemplarse la cara de este escritor al servicio del fascismo y enemigo acérrimo de cualquier atisbo de democracia.

domingo, 17 de enero de 2016

¿De verdad queréis que vuelva a ser presidente?




Este que veis aquí es el presidente más inepto que hemos tenido en este período "democrático". Hemos aguantado durante los últimos cuatro años sus torpezas, su ineptitud, sus caprichos y sus desaciertos. Pues bien, el tal Mariano Rajoy continúa, impertérrito (ahora como presidente en funciones), continúa, decía, tratando como sea de proseguir siendo, una legislatura más, Presidente de Gobierno de nuestro país. Y, como buen pepero que se precie, no desperdicia ninguna oportunidad para postularse como tal. ¿Que Catalunya quiere la independencia? Ahí está él. Defendiendo la unidad y la grandeza de las Españas. ¿Que el rey Felipe VI tiene problemas con sus chanchullos y trapicheos? No hay impedimento. El lameculos de Rajoy defenderá esta monarquía, porque en ello le va, en parte, el puesto. 
Este carpetovetónico, cara al sol, lector impenitente de El Marca, tiene el oscuro "oficio" de ser el defensor de los valores patrios.
Pero como por sus hechos los conoceréis, y por sus expresiones, he aquí algunas de ellas.
En Lima, Perú, se refirió al gobierno de Perú como al de Cuba. En otra ocasión dejó esta perla: "ETA es una gran nación". En el debate con Zapatero, le preguntó a éste: ¿Qué es un bonobús? Más recientemente profirió aquello de : "España es una gran nación, y los españoles muy españoles y mucho españoles". Y termino con una perla que se pudo escuchar en todo el mundo. En un programa de radio el periodista Carlos Alsina, preguntaba a Rajoy sobre el tema catalán. Entonces, nuestro flamante Mariano, sobre si perderían la nacionalidad española y aclararle Alsina que no, preguntó, muy seguro de sí mismo: ¿Y la europea? Las risas todavía se pueden oír en toda Europa.
Y como no quiero pecar de prolijo, aquí os dejo este escrito para que, si aún no lo habéis hecho, reflexionéis ahora.

jueves, 14 de enero de 2016

Escritos de madrugada




Ahora que aún es madrugada me preparo para escribir. Escribiente nocturno siempre cavilando en la escritura. Constantemente lo digo, es mi pasión. Y si la hora ayuda, como es este el caso, miel sobre hojuelas. Digamos que soy grafómano por naturaleza. Que nunca me falte un folio en blanco y un bolígrafo. No obstante, en estos tiempos, qué mejor ayuda que un ordenador para escribir, publicar y que las palabras escritas salgan al ciberespacio en busca de algún lector que dé con ellas y, si puede ser, que se regocije con lo que he plasmado en este blog.
La escritura requiere paciencia, tener conocimientos de la gramática. Procurar, o al menos intentar, no cometer faltas de ortografía ni solecismos. Y leer, leer y leer. También procurar algo que resulta algo arduo, complicado y que buscamos desesperadamente los que nos dedicamos a esto, seamos o no profesionales. Me estoy refiriendo al estilo. Todos buscamos nuestro estilo. Lo que nos distingue de los demás. Porque eso se nota. Y entre los que rellenamos folios reconocemos fácilmente al que escribe sin trabas, con soltura. Que se le nota en seguida el talento. Eso que todos quisiéramos poseer. Cada uno tenemos nuestros maestros, nuestros mentores. Mas llega un punto en que tenemos que volar libremente. Contar con nuestros propios recursos. Poder distinguirnos de los demás y que los demás nos lo reconozcan.
Y como las horas pasan fugazmente y quiero que este post se publique precisamente en este momento, termino aquí lo que comencé con tanto ánimo.
Nos vemos.

miércoles, 13 de enero de 2016

Tomando café

La hora del café es un invento, o creación, o costumbre, que deberíamos de celebrar. De hecho yo lo hago. Su preparación para mí es toda una liturgia. No sé por qué pero a mí me gustan más los cafés que yo preparo que los que me preparan los demás. Busco la cafetera, echo el agua suficiente y a por la caja del café. La abro, olfateo su aroma inconfundible y al fuego. Luego a esperar el bullir del agua dentro de la cafetera. Ya va llegando el momento de estar a punto para recrearme con mi estimuladora bebida. Suelo tomar café dos veces al día, en el desayuno y después de la comida. Y lo tomo solo. Es decir, sin añadirle leche, ni limón, ni tan siquiera azúcar. Es este un hábito que retomé en el verano del año pasado. Siempre me encantó el olor, casi balsámico, de esta bebida. A ciencia cierta ignoro por qué dejé de tomarlo. Mi memoria se pierde en el tiempo tratando de recordarlo. Bien es cierto que he buscado y husmeado por acá y por acullá las posibles propiedades que pudiera tener tan atractivo producto. Y lo que he encontrado es más favorable que desfavorable. Sabiendo, a ciencia cierta, que muchos estudios son pagados por grandes compañías para tener un excelente atractivo de cara a los consumidores. Viene a ser como las Bolsas en el plano económico (y permítaseme la digresión). Por ejemplo, llega Draghi y dice que la economía de tal país progresa en valores no muy satisfactorios (esta frase me la he inventado yo para que percibáis el lenguaje críptico que se gasta en estos sectores), y al día siguiente la Bolsa del referido país sufre una caída inevitable en sus indicadores económicos.
Pues, más o menos, los estudios sobre cualquier otro producto depende, en gran medida, de la confianza que le otorguen ciertas personas, generalmente expertos en la materia.
Y, como mi café, tomado sorbo a sorbo, se va enfriando, os dejo aquí para otra próxima ocasión.

martes, 12 de enero de 2016

A mis compañeros republicanos



Dado que los monárquicos se nos están subiendo a las barbas, porque cada vez son menos y tratan de aplastar toda ideología republicana, quiero defender mi derecho a sentirme republicano antes de que Rajoy, Pedrito y algún que otro seguidor aúlico traten de prohibir los símbolos de los que muchos ciudadanos nos sentimos orgullosos.
Sólo con recordar los nombres de insignes personajes que conformaron la II República y compararlos con los mandatarios actuales sería para pensárselo. Políticos como Azaña, Madariaga, Negrín, Largo Caballero, Besteiro y tantos otros que al compararlos con los actuales dirigentes, se les tenía que caer la cara de vergüenza a estos últimos. Eran gente preparada, muy preparada, que intentaron desde el primer momento modernizar el país. Esa fue su primera preocupación. 
La preocupación de nuestros actuales dirigentes, por el contrario, es mantener la poltrona y los beneficios, lucro o privilegios que ello conlleva. Y al frente de todos ellos, nuestro ilustre rey Felipe VI. El cual parece que aprendió bien las "artes" de su padre. Y en algunas cosas hasta lo superó. Y eso que era difícil.
En nuestro país vivimos una dictadura coronada. Muchos no lo quieren ver. Empero, solo hay que ir contando las libertades que nos están recortando draconaniamente día a día.
Hasta que alguna vez gritemos: "Basta". Y esperemos que esto ocurra en un no muy dilatado lapso de tiempo.
Y poder manifestar al igual que el recientemente fallecido comandante Robert:  Jamás seré siervo del rey de España. ¡Viva la República!