Este que veis aquí es el presidente más inepto que hemos tenido en este período "democrático". Hemos aguantado durante los últimos cuatro años sus torpezas, su ineptitud, sus caprichos y sus desaciertos. Pues bien, el tal Mariano Rajoy continúa, impertérrito (ahora como presidente en funciones), continúa, decía, tratando como sea de proseguir siendo, una legislatura más, Presidente de Gobierno de nuestro país. Y, como buen pepero que se precie, no desperdicia ninguna oportunidad para postularse como tal. ¿Que Catalunya quiere la independencia? Ahí está él. Defendiendo la unidad y la grandeza de las Españas. ¿Que el rey Felipe VI tiene problemas con sus chanchullos y trapicheos? No hay impedimento. El lameculos de Rajoy defenderá esta monarquía, porque en ello le va, en parte, el puesto.
Este carpetovetónico, cara al sol, lector impenitente de El Marca, tiene el oscuro "oficio" de ser el defensor de los valores patrios.
Pero como por sus hechos los conoceréis, y por sus expresiones, he aquí algunas de ellas.
En Lima, Perú, se refirió al gobierno de Perú como al de Cuba. En otra ocasión dejó esta perla: "ETA es una gran nación". En el debate con Zapatero, le preguntó a éste: ¿Qué es un bonobús? Más recientemente profirió aquello de : "España es una gran nación, y los españoles muy españoles y mucho españoles". Y termino con una perla que se pudo escuchar en todo el mundo. En un programa de radio el periodista Carlos Alsina, preguntaba a Rajoy sobre el tema catalán. Entonces, nuestro flamante Mariano, sobre si perderían la nacionalidad española y aclararle Alsina que no, preguntó, muy seguro de sí mismo: ¿Y la europea? Las risas todavía se pueden oír en toda Europa.
Y como no quiero pecar de prolijo, aquí os dejo este escrito para que, si aún no lo habéis hecho, reflexionéis ahora.